sábado, mayo 20, 2006

Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón

Pepi Luci Bom
Estoy como loca de contenta, por fin tengo mi propia (mini) plantación de tomates. Tres plantas preciosas, que están en la zona más soleada de mi balcón botánico. Fue mi padre el que me regalo las matas, que son del mismo tipo de tomate que él cultiva en Hendaia. Da unos tomates de una textura y sabor muy parecido al raf, pero bastante más grandes y que en esta zona, creo que recibe el nombre de tomate de caserío. Me va a traer también una planta de tomates cherrys, así que espero ser un poco autosuficiente a nivel tomatero con las cuatro plantas. Nunca pensé que una planta que no fuera cannabis sátiva, pudiera darme tanta felicidad :)

Las chicas del montón son la menta, hierbabuena, laurel, cilantro, perejil, albahaca, tomillo, salvia… Todas mis nenas aromáticas se encuentran en un estupendo estado de salud, después del suicido colectivo del año pasado. Me han dado un truco muy bueno para que no vuelva a vacilarme el cochino pulgón. Consiste en poner en cada una de las macetas de los tomates, una planta de clavelitos chinos. Si el pulgón tiene la mala baba de aparecer en esa maceta, el clavel chino o tagete, se encargará de luchar contra él, protegiendo de paso la planta de tomate. Viva la guerra biológica!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡¡¡¡Preciosas tus plantitas de la felicidad!!!!

Anónimo dijo...

Hace unos dias que conozco tu blog, es muy curioso.

Creo que es muy dificil que a una tomatera le entre el pulgon.

Yo tuve de pequeño una y al lado una planta de lenteja plagada de pulgones y la tomatera no tenia ni uno.
Hasta un mariquita vino a comerse los pulgones. Estuvo mucho tiempo en esa planta.

La solanáceas como la tomatera y la patata tiene sustancias toxicas para algunos bichos, he incluso humanos según las cantidades y la toxicidad de las plantas.
Hay una variedad de patata toxica.