jueves, febrero 15, 2007

¡Por la gloria de mi madre!

El otro día, comiendo en familia, mi madre se descolgó con la siguiente afirmación:

“La comida sabe diferente, según la comas con la mano izquierda o con la derecha”

Yo que pensaba que en casa la de las teorías absurdas era yo sola y resulta que esa afición va a ser hereditaria. Mi madre es una
zurda orgullosa y convencida, a la que en tiempos sometieron a todas las perrerías que se hacían contra los siniestros; desde atarle la mano izquierda a la espalda, hasta darle un buen bofetón, cuando el instinto mas primario le inducía a usar la mano equivocada. Una de las patrocinadoras más importantes de este trato, resultaba ser una monja temerosa de Dios, que veía en los zurdos a los sirvientes del Diablo. ¡Hay que joderse!

El caso es que llevo días haciendo el payaso, comiendo simultáneamente con la mano derecha e izquierda, para comprobar si mi madre es una visionaria o simplemente está como las maracas de Machín. Aunque los estudios demuestran, que en el caso de un diestro, el parte derecha del cerebro es la intuitiva y la izquierda la racional, no he encontrado ninguna información relativa al sabor, excepto que la parte encargada de controlar ese factor es el lóbulo parietal. Pero claro, tenemos dos lóbulos parietales y si cada hemisferio del cerebro controla la parte opuesta del cuerpo, no sé que diferencia puede haber entre introducir el alimento o masticarlo, por un lado u otro, porque además tragamos por la parte central… ¡Arggg! ¡Voy a tener un cortocircuito!

En fin amatxo, dedícate a pintar cuadros y déjate de divagaciones pseudo científicas, que me vas a volver loca.

Aquí tenéis un interesante artículo científico sobre el gusto y el cerebro.

Cuestión de gusto (Por la boca muere el pez)

5 comentarios:

Doña Col dijo...

La del cortocircuito cerebral voy a ser yo... Por lo visto yo también debía ser zurda y me obligaron a ser diestra... no se... el caso es que mi cerebro lleva un cacao mental con derecha e izquierda de flipar... no las diferencio correctamente y hago las cosas indistintamente con una mano u otra. Así que de vez en cuando si no me doy cuenta, me sorprendo comiendo con la izquierda y la comida me sabe igual... igual de bien... jejeje
Misterios insondables del cerebro humano que a mi a poco me vuelve loca cuando me saqué el carné de conducir...

Anónimo dijo...

Que cómico, hoy iba a escribir algo en mi blog sobre lo complicado de ser zurda en la cocina. A mi no me obligaron a cambiar de mano, pero igual tengo el cerebro al revés

milcolores dijo...

Lo de los zurdos es un tema que da mucho de si. Hace un par de semanas, salía de una pastelería cuando escuché a dos señoras mayores mantener esta conversación tan ALUCINANTE:

Señona 1: "Mira, yo la calé desde el primer momento. Es mala, criticona... Lo tiene todo. Fíjate que encima es zurda.

Señora 2: Ya me parecía a mi...

Te juro que no me lo podía creer. Quise decir algo, pero no me dio tiempo a reaccionar ^_^

Doña Col dijo...

Dios mio!!! Primero esta el anticristo y luego los zurdos...
jajaja
De España cañí, de peineta y castañuela...

Anónimo dijo...

Yo me moriria del susto!! jajaj que putazo!!