Un truco muy simple y resultón que aprendí hace unos días, pasando una jornada en la cocina del Celler Can Roca. Nacho Baucells, jefe de cocina del Celler, me explicó el procedimiento, al ver como colocaban una perfecta espiral de cebollino sobre uno de los platos del menú. Tan fácil como seguir estos pasos:
Tomamos una hoja de cebollino que esté tersa y sin magulladuras.
Cortamos por la mitad, haciendo que la punta del cuchillo se deslice suavemente sobre la hoja de cebollino, siguiendo el sentido de sus hebras.
Seguimos cortando en juliana cada una de las dos mitades, de forma que nos resulten por cada una de las hojas, seis tiras lo más finas posibles de cebollino.Se dejan en un recipiente con agua y hielos durante unos minutos, y poco a poco se irán rizando.
El resultado, como veis, muy diferente al que estamos acostumbrados a ver. A pesar el uso y abuso que se ha hecho de esta hierba aromática, saber escoger los platos donde puede acompañar realzando o matizando sabores, nos puede permitir devolverle la dignidad que ha perdido con tanto exceso.
4 comentarios:
Muy bonito. Uno de esos detalles diferentes que quedan muy bien en un plato.
GRacias por compartirlo.
¡Saludos!
Fantástico, esto lo tengo que poner en práctica ya de ya ¡menudo descubrimiento!
Un abrazo.
!Un truco estupendo, resultón y muy sencillo! Gracias por compartir. Besos
Parece fácil y debe quedar muy bien en algunos platos. Gracias por compartir!
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